lunes, 13 de marzo de 2017

ESTUDIAR SI QUE SIRVE, SIEMPRE!!

Hoy os comparto una historia de superación y en la que la educación tiene un papel importantísimo. Como decía Engels "no es lo mismo nacer en un castillo que en una choza", pero siempre he pensado que con esfuerzo y educación, podemos cambiar nuestro destino. 
La historia se publicó en el Periodico "El confidencial"  escrito por Jorge París el 6 de marzo






La alumna del poblado que llegó a las 'olimpiadas' de la FP Tania Granado, estudiante de FP básica de estética, en el poblado de Cañada Real. A los 15 años dejó de estudiar porque su familia no podía pagar ni el bus. A los 19 ha vuelto a clase y ha llegado al campeonato nacional de Formación Profesional. Su tutora y ella encarnan el 'efecto pigmalión', de cómo una maestra implicada consigue los mejores resultados en una alumna desfavorecida. 

De complexión delgada y baja estatura, cresta verde en mitad del cráneo rapado teñido de leopardo y tela de araña, rasta verdimorada, piercings, perforaciones, y tatuajes. Como una mezcla entre Lisbeth Salander y Tank Girl. Dentro del impoluto uniforme blanco la chica se mueve grácil batiendo emulsiones, aplicando cremas y perfilando esmaltes.  La chica del poblado que llegó a la 'olimpiada' FP Con sumo cuidado ejecuta el protocolo ensayado para untar la delicada mascarilla facial de alginato en el modelo. Pese a lo difícil de la técnica, conseguirá retirarle la envoltura íntegra, destreza por la que recibe felicitaciones del jurado del campeonato nacional de la Formación Profesional. La tutora, agazapada en una esquina, sigue atenta los movimientos de su discípula. Sujetándose como puede los nervios que le causa el tener prohibido dirigirse a ella durante la prueba. La alumna de la FP básica se bate en duelo con las once mejores estudiantes de Estética del país, todas de grado superior y con más experiencia. Hay tensión en el ambiente. De aquí saldrá la representante de España en las 'olimpiadas' de la FP, que este año son en Abu Dabi. "Corre Tania, corre, que cada segundo es clave para que no se solidifique la mascarilla", murmura para sí la maestra, como queriendo enviar a su alumna el mensaje por telepatía. 

Rebobinemos hasta el primer día del curso escolar en el I.E.S Rey Fernando VI, de San Fernando de Henares (Madrid). Una profesora de Estética, Lucrecia Solana, comprueba el nivel de sus nuevas alumnas y una le dejará boquiabierta. "Hizo un maquillaje de ojos ahumados de noche absolutamente perfecto y en las manos, todo tipo de esculturas de uñas". Esa chica, de 19 años, era Tania Granado y ese día regresaba a las aulas, años después de verse obligada a abandonar los estudios para ponerse a trabajar. El presupuesto familiar no alcanzaba ni para el billete del bus al instituto. Hija de chatarrero y limpiadora, vive con sus padres, con su novia, su hermano, su perro Cora y varios gatitos en una casa baja del sector 3 de la Cañada Real. Hija de chatarrero y limpiadora, la joven de estética punk y modales suaves, vive con sus padres, su novia, su hermano, su perro 'Cora' y varios gatitos en una casa baja del sector 3 de la Cañada Real, un asentamiento ilegal al este de Madrid con mala reputación. Ella le quita hierro a la fama de peligroso de su barrio: "Yo vivo en una zona tranquila. La peor parte está muy lejos, a media hora caminando en línea recta desde mi casa", indica. A sabiendas de que no hay mucha gente que se atreva a entrar al poblado, ella prefiere vivir allí antes que en una de las colmenas abigarradas de pisos que se ven por la ventana del instituto. Aunque en Cañada Real las familias sigan bajo la amenaza de la piqueta municipal, ansiosa por echar abajo las casas ilegales, y en permanente alerta ante nuevas ocupaciones que alteren la paz vecinal. Mientras practica un masaje con envoltura de algas en el cuerpo de una de sus compañeras de clase en los días previos al concurso nacional, Tania agradece que su familia apoyara la decisión de matricularse de nuevo en el instituto. "Si no, todo esto que estoy viviendo no me habría ocurrido. No estaría compitiendo y haciendo lo que más me gusta en el mundo, que es dibujar, maquillar, esculpir uñas". Su mayor golpe de suerte, sin embargo, ha sido cruzarse en el camino de la profesora que ha apostado por ella desde el primer día. La mujer que se ha tomado como un reto personal que todo el mundo descubra el potencial que encierra su alumna de aspecto más llamativo. "Maquilla de maravilla. Lo suyo es talento natural. Se ha ido formando de manera autodidacta, practicando con las vecinas, y su fuerte es la creación de fantasía", resume la maestra. "Consigue trabajos mejores que los modelos que se le entregan". Cuando la maestra supo que Madrid buscaba representante regional para un concurso de FP estética, inmediatamente pensó en Tania. "Pero a esos certámenes siempre se lleva a los alumnos de cursos avanzados, los de grado superior, no a una chica de la básica, la antigua garantía social. Pregunté en el instituto si alguien más se animaba, pero nadie se quería presentar. La dirección me apoyó y fuimos a las pruebas de diciembre sin demasiadas expectativas, pensando que no tendría nada que hacer". Para sorpresa general, Tania se impuso a las alumnas de los institutos de referencia en la especialidad. El jurado valoró su técnica y su temple.

Como dicen sus compañeras: "Es que tiene arte y es muy limpia trabajando". Maquilla de maravilla. Lo suyo es natural. Se ha formado autodidacta, practicando con las vecinas, y fuerte es la fantasía A la vencedora, el triunfo que le catapultaba a los Nacionales le alegró sobre todo "por esas mujeres, de los otros institutos, que me decían que con mi aspecto no tenía nada que hacer". Su maestra asiente y dice: "A veces me he preguntado dónde voy yo con esta muchacha, que me van a catalogar y en estética la imagen lo es todo". Profesora y alumna han tenido solamente 60 días para preparar el Campeonato de España, y han apurado cada minuto, fines de semana incluidos, en los que Tania y su novia cogían el petate y se instalaban en casa de la profesora. Las seis pruebas a preparar eran más complejas que las de las oposiciones. La depilación, el maquillaje y la escultura de las uñas no les preocupaban tanto como las diferentes envolturas, mascarillas, los masajes y la combinación de varias de esas técnicas dentro de un mismo ejercicio. "Se ha esmerado mucho. Ha tenido que aprenderse las composiciones de las cremas para saber cuáles son más efectivas para cada tipo de piel. Ha visionado decenas de vídeos de masajes y se ha pasado horas practicando sin parar", explica la maestra. Lo último fue aprender a ejecutar un masaje hawaiano llamado 'Lomi Lomi', que en los currículum solo aparece mencionado en una línea y bajo el epígrafe de "otras técnicas". La dirección de FP regional contrató a una experta en esta disciplina para que acudiera al instituto a formarla en una sesión. El Lomi Lomi ha sido precisamente una de las pruebas que mejor ejecutó Tania en los nacionales, también llamados 'Spainskills', celebrados la pasada semana en el Ifema de Madrid. "Lo hizo perfecto, lo bordó. Fue la única aspirante que bailó sobre el cuerpo que masajeaba", dice la tutora. La competencia en estos tres días del certamen nacional ha sido feroz. En la primera jornada, los nervios, de normal templados, no jugaron del todo a su favor. Pero el segundo día consiguió centrarse y mostró una confianza ejemplar en el aplicado de mascarillas faciales, esmaltado de uñas de hombres y en el masaje 'Lomi Lomi'. El tercer día, le hubiera gustado haber brillado en su especialidad, el maquillaje, pero no alcanzó la perfección. Con el esmalte, según su profesora, dejó el pabellón alto. Sin el galardón, que se llevó la esteticista valenciana, Abu Dabi tendrá que esperar a Tania. Ahora maestra y alumna afrontan un nuevo reto, encontrar las prácticas adecuadas. "Voy a tocar todas las puertas, voy a ir donde haga falta", dice la tutora, que conoce que el sueño de su discípula es formarse en caracterización de modelos, cine, teatro o televisión.

Mientras la joven se despide de su modelo, bromeando sobre el esmalte oscuro de uñas que le acaba de perfilar, la profesora confiesa que espera que todo este esfuerzo dé sus frutos. Está diciendo, sin decirlo, que confía en que la vida no le obligue de nuevo a la joven a tirar la toalla y pueda desarrollar su talento.
Aunque eso suponga tener que dejar el poblado.





1 comentario:

  1. Hola, muy bueno el articulo también pienso que estudiar sirve a mi me gustaría especializarme, estoy pensando en estudiar un curso de comercial de seguros y espero trabajar como especialista en seguros comerciales

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